"Bolas de Fuego". Del Enigma a la Ciencia.

Además de la canción y la película sobre Jerry Lee Lewis, las bolas de fuego son un fenómeno físico que ha intrigado por igual a físicos, amantes de misterios paranormales y defensores del fenómeno OVNI. Pueden observarse ocasionalmente durante las tormentas, moviéndose lentamente por el cielo y hasta ahora han permanecido sin una explicación física convincente. Eso ha desatado todo tipo de especulaciones sobre su origen y características. Los observadores suelen describir una bola de alrededor de 40 centímetros, de colores variados entre el amarillo y el azul que permanecen durante unos segundo o en ocasiones incluso minutos. Algunos investigadores piensan que se producen cuando un rayo golpea el suelo y vaporiza parte del material que se encuentra. Muchas ideas pero pocas teorías firmes.

Los científicos se han enfrentado durante mucho tiempo a cuestiones enigmáticas relacionadas con la naturaleza de bastantes de estos rayos con apariencia de bolas de fuego.
Ahora, un equipo de físicos de la Universidad de Innsbruck, Austria, ha calculado que el campo magnético producido por ciertos relámpagos puede generar en el cerebro humano imágenes de formas luminosas, conocidas como fosfenos. Este descubrimiento puede ofrecer una explicación para muchos avistamientos de rayos en bola.

Los físicos Josef Peer y Alexander Kendl, de la mencionada universidad, han estudiado campos electromagnéticos de diferentes tipos de relámpagos que se desencadenan durante las tormentas. Sus cálculos sugieren que los campos magnéticos de una clase específica de descargas eléctricas repetitivas de larga duración muestran las mismas propiedades que las estimulación magnética transcraneal (EMT, o TMS por sus siglas en inglés), una técnica empleada frecuentemente en la práctica clínica y psiquiátrica para estimular la actividad neuronal en el cerebro humano.

Los campos magnéticos de ciertas características inducen campos eléctricos en el cerebro, específicamente en las neuronas de la corteza visual, que pueden generar fosfenos. En las aplicaciones clínicas de la EMT, son bien conocidos los testimonios de pacientes y sujetos de prueba informando de percepciones visuales luminosas de formas y colores variables, tal como señala Kendl. Él y Peer han calculado que la cercanía de ciertos relámpagos también puede generar estas visiones luminosas, que fácilmente podrían apreciarse como rayos en bola.

Los rayos en bola son un fenómeno bastante raro. Algunos investigadores han producido "bolas de fuego" luminosas a escala de laboratorio, que no se diferenciaban mucho de un rayo en bola y hasta podrían explicar algunas de las observaciones, pero desafortunadamente la mayoría duraba muy poco.

¿En qué casos entonces, un relámpago puede crear un fosfeno en forma de bola? Son muy raros los rayos con descargas repetitivas que puedan producir campos magnéticos estimulantes durante períodos de varios segundos, pues sólo se produce uno por cada cien rayos normales. Un observador ubicado a unos pocos cientos de metros de un relámpago de una clase mucho más frecuente puede experimentar un fosfeno magnético en forma de una mancha luminosa. También pueden inducirse otras sensaciones, como ruidos u olores.